China está al borde del colapso económico porque no tiene suficiente crecimiento de la población para mantener su propio sustento económico, aseguró el analista y consultor geopolítico estadounidense, Peter Zeihan.
Zeihan, quién recientemente publicó su cuarto libro: “The End of the World is just the Beginning: Mapping the Collapse of Globalization” (“El fin del mundo es solo el comienzo: Mapeando el colapso de la globalización”), explicó que “la gravedad del colapso demográfico de China es el resultado de la política de un solo hijo establecida por Pekín en 1980 y que estuvo en vigor hasta 2015”.
“Con la tasa de natalidad en lugares como Pekín y Shanghai, siendo la más baja en la historia humana, lo más probable es que China pasó su máximo de población hace 15 años, y estamos en camino de la disolución de China como entidad económica antes del final de la década”, sostuvo Zeihan, en una entrevista al medio Taiwan News.
“Con un país tan grande, tanto en términos de población como de economía, un colapso tan catastrófico no tiene precedentes en la historia de la humanidad. La naturaleza y magnitud de esta crisis podría tener resultados políticos impredecibles”
Peter Zeihan analista, especialista en estudios asiáticos.
Zeihan explicó que cuando te quedas sin personas de 20 años o menos, en realidad creces más rápido por un tiempo porque todo el dinero que gastas en tus hijos lo estás gastando en consumo e inversión. pero cuando te quedas sin personas de 40 años o menos, comienzas a ver la explosión en los costos laborales “y China ha estado en ese entorno durante 20 años”.
“Entonces, el costo de la mano de obra china se ha multiplicado por casi 15 desde el año 2000. Lo cual, nuevamente, no tiene precedentes históricos”, señaló Zeihan.
No construyen, ensamblan
Para el analista, la fabricación en China “es algo extraña”: “En realidad no construyen mucho. Ensamblan una gran cantidad de cosas y no quiero sugerir que no hagan nada, pero el tipo de mano de obra calificada que se requiere para el desarrollo tecnológico, simplemente no la tienen”.
Uno de los problemas que señala Zeihan es que los chinos tienen una gran cantidad de personas con habilidades relativamente bajas, nada en el medio, y luego un puñado de personas en la parte superior y eso no permite que el sistema se desarrolle.
Culto a la personalidad
Otro problema que indica Zeihan es que parte del surgimiento del culto al líder chino Xi Jinping es que “simplemente no hay comunicación en absoluto, porque nadie quiere que nada de lo que digan, bueno o malo, se filtre al máximo líder porque no saben cómo va a reaccionar”.
Zeihan dice que hay una permanente falta de comunicación en China y lo ejemplificó la reciente crisis con los globos espías descubiertos por Estados Unidos.
“La desconexión entre la operación de inteligencia que estuvo involucrada y el Ministerio de Relaciones Exteriores que tuvo que lidiar con las consecuencias, dejó muy claro que el Ministerio de Relaciones Exteriores no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Y hemos visto suceder cosas como esta en las relaciones diplomáticas entre los chinos y el resto del mundo una y otra vez durante los últimos tres años”, subrayó Zeihan.
“No hay coordinación. No existe un equivalente del consejo económico nacional o del consejo de seguridad nacional. Y eso significa que es solo hay un tipo que toma decisiones en el vacío y eso conduce a resultados políticos catastróficos”, insiste Zeihan.
Los otros países
Sin embargo, China no es el único país que se enfrenta a graves problemas demográficos. Entre otras naciones industrializadas en Asia, Zeihan dijo que la situación de Corea del Sur es la más grave y la más similar a la de China.
Japón, aunque se enfrenta a problemas similares, ha sido uno de los países más proactivos del mundo para prepararse para su propia disminución de la población. Por lo tanto, Japón está mejor preparado para capear la transformación económica y social que la mayoría de los países.
En cuanto a Taiwán, Zeihan advirtió que está en una “vía muy negativa” con respecto a la disminución de la población. Sin embargo, Taiwán también tiene “un poco más de espacio que Japón o Corea per cápita”. Según sus estimaciones, Taiwán todavía tiene de 20 a 30 años antes de que la situación se vuelva tan grave como Corea del Sur.
Según Zeihan, en ese momento, para Taiwán sería prudente seguir a Japón en la adopción de medidas y políticas destinadas a mitigar los peores efectos del declive demográfico.