Hondureña atrapada en Medio Oriente espera evacuación de zona del conflicto

Residente en Comayagua, Gabriela Soto, quien labora para una compañía panameña que instala software, quedó atrapada por la guerra en Medio Oriente, en el conflicto Israel - Líbano.

Israel ha destruido numerosos emplazamientos militares cerca de la frontera israelí y dañado gran parte de los arsenales de armas de Hezbolá, incluidos misiles estratégicos.

Gabriela Soto, una joven hondureña originaria de la colonia Vistahermosa en Comayagua, se encuentra atrapada en medio del creciente conflicto en el Medio Oriente, específicamente en Beirut, Líbano. Su situación ha generado preocupación entre sus familiares y amigos en Honduras, quienes esperan su regreso seguro a casa.

Soto forma parte de un equipo de una compañía panameña dedicada a la instalación de software en la región, que llegó a Líbano en agosto. La situación se ha vuelto crítica debido a los constantes bombardeos en Beirut, que comenzaron a finales de agosto. 

Carlos Grant, ingeniero y compañero de Flores, informó a HCH de Honduras que recientemente han sido notificados sobre una posible evacuación hacia Estambul, Turquía, para la próxima semana. 

“Las cosas están en constante movimiento, y la situación es tensa, pero esperamos poder salir pronto”, comentó Grant.

Sus relatos describen noches de miedo e incertidumbre, con alarmas sonando y bombardeos que resuenan en la capital. 

“La serenidad es difícil de mantener. Escuchar los ataques a medianoche es aterrador”, afirmó. La seguridad del equipo llevó a un traslado temporal a una zona montañosa, 15 kilómetros lejos del epicentro de los ataques. Sin embargo, los estruendos de los bombardeos se sienten incluso a esa distancia.

Gabriela se encuentra en su habitación en el hotel donde se alojan.

“Ella está bien, pero preocupada por la situación. No ha podido comunicarse con la embajada hondureña, pero estamos en contacto con la representación consular panameña, que ha estado muy atenta”, explicó Gran.

El ingeniero también destacó su aprecio por Honduras, donde vivió durante 3 años y tiene amigos cercanos. 

“Espero que todos regresen con bien y que la misión haya valido la pena. La situación es difícil, pero tenemos esperanza en que pronto podremos salir de aquí”, concluyó.

Exit mobile version