El indultado Juan Orlando Hernández rechaza acusaciones de presidenta Castro y niega plan para ingresar a Honduras

El expresidente Juan Orlando Hernández, quien quedó en libertad el 1 de diciembre, calificó de falsas las acusaciones de la presidenta Xiomara Castro, negó cualquier plan para regresar a su país o alterar el orden constitucional. Aseguró que los señalamientos buscan generar pánico y desviar la atención en medio de la actual tensión política y electoral.

Juan Orlando Hernández, expresidente de Honduras.

El expresidente de Honduras recién indultado, Juan Orlando Hernández (JOH), rechazó as acusaciones de la presidenta Xiomara Castro y aseguró que son “completamente falsas”.  En un pronunciamiento público, el exmandatario negó cualquier plan para ingresar al país o intención de romper el orden constitucional y afirmó que los señalamientos buscan generar pánico y desviar la atención en medio de la coyuntura política.

Hernández sostuvo que la narrativa impulsada desde el oficialismo responde a una estrategia del partido Libertad y Refundación (Libre) para provocar caos y distraer a la opinión pública.

“No existe ningún plan de ingreso al país ni intento de ruptura del orden constitucional”, afirmó, al tiempo que pidió a la ciudadanía mantener la atención en el proceso electoral y en el escrutinio especial que desarrolla el Consejo Nacional Electoral (CNE).

En su mensaje, el exgobernante (2014-2022) reiteró que no tiene intención de regresar a Honduras “en este momento”, argumentando que el actual gobierno no respeta las garantías ni los derechos fundamentales.

Según explicó, su decisión obedece a razones de seguridad personal y familiar ante lo que calificó como una persecución política y una instrumentalización de la justicia en su contra.

Hernández también aseguró contar con información sobre supuestos planes para atentar contra su vida y la de su familia. En ese contexto, responsabilizó directamente a los líderes del gobierno actual y a la dirigencia de Libre por cualquier hecho que ponga en riesgo su integridad o la de sus allegados.

“Una cosa es la diferencia política o ideológica; otra muy distinta es cruzar la línea y poner en riesgo vidas humanas”, expresó.

El expresidente afirmó que, a su juicio, el uso reiterado de su nombre responde a intentos por encubrir lo que calificó como el “fracaso” del gobierno y a una estrategia para aferrarse al poder. Sostuvo que esa práctica “ya no funciona” y que el pueblo hondureño la rechazó en las urnas.

Atención al escrutinio

En relación con el proceso electoral, Hernández llamó a que el escrutinio especial sea acompañado por todos los sectores de la sociedad, así como por observación nacional e internacional. Subrayó que las elecciones “interesan a todos” y no únicamente a los partidos políticos, e instó a respetar los resultados oficiales que emita el CNE.

Finalmente, el exmandatario dijo que su principal interés es permanecer con su familia, recuperar el tiempo perdido y procurar su bienestar. “Como buen hondureño, deseo paz, unidad y prosperidad para mi país”, concluyó, al tiempo que pidió bendiciones para Honduras.

La presidenta Castro llamó a protestas de calle justificándolo con el “potencial” retorno de Hernández a Honduras, para proclamar vencedor de las elecciones al nacionalista Nasry Asfura, quien encabeza el escrutinio electoral.

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