Fracasa plazo de negociación por venta de puertos panameños de firma china CK Hutchison

El acuerdo por el control de 43 terminales portuarias, incluidas dos ubicadas en el Canal de Panamá, sigue sin concretarse, en medio de crecientes tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China.

La firma china CK Hutchison controla dos puertos panameños en los extremos del Canal de Panamá.

El plazo límite para cerrar las negociaciones exclusivas sobre la venta de activos portuarios globales por parte del conglomerado CK Hutchison, liderado por el magnate Li Ka-shing, venció este domingo sin que se alcanzara un acuerdo, en una operación valorada en $23,000 millones. Analistas prevén que las complejas negociaciones continúen, afectadas por la creciente rivalidad entre Estados Unidos y China.

La operación contempla la venta de participaciones en 43 puertos internacionales, incluidos dos ubicados estratégicamente en los extremos del Canal de Panamá, a un consorcio liderado por Terminal Investment Limited —vinculada a la naviera MSC, la más grande del mundo— y el gestor de activos estadounidense BlackRock.

El 27 de julio marcaba el fin del periodo de negociación exclusiva establecido por CK Hutchison desde su comunicación oficial del 4 de marzo, cuando notificó a la bolsa el inicio del proceso.

Sin embargo, ni CK Hutchison ni el consorcio comprador emitieron declaraciones al cierre del plazo. Expertos legales y del sector marítimo ya habían advertido que el acuerdo difícilmente se concretaría en su forma original debido a obstáculos regulatorios en China continental y Panamá, además de los riesgos políticos derivados de las tensiones comerciales EE. UU.-China.

Influencia china en Panamá

La envergadura del acuerdo refleja la importancia geoestratégica de los activos involucrados. La inclusión de puertos en puntos críticos como el Canal de Panamá ha despertado preocupaciones en Washington sobre el control chino en infraestructuras clave del comercio internacional.

El proceso de venta ha generado no solo tensión con Beijing, sino también la atención del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha sido enfático en su intención de reducir la influencia china en zonas estratégicas como el Canal de Panamá. Al respecto, el mandatario calificó la transacción como un “reclamo” soberano del control portuario global, especialmente en rutas clave.

Trump ha declarado públicamente su intención de “recuperar los puertos” del Canal, en medio de preocupaciones sobre la creciente influencia china en la región. Además, el  secretario de Estado Marco Rubio señaló que la presencia de empresas chinas en zonas estratégicas como Panamá podría representar un riesgo en caso de un conflicto con China.

En marzo, CK Hutchison anunció la venta de su paquete global de 43 terminales —incluyendo los puertos panameños— a un consorcio conformado por MSC y BlackRock, en una operación valorada en $23,000 millones. Mientras MSC se haría con la mayoría de las terminales, BlackRock se quedaría con Balboa y Cristóbal. El presidente estadounidense Donald Trump celebró entonces el anuncio como una victoria frente a China, que actualmente mantiene influencia en otros puntos estratégicos del canal a través de firmas asiáticas.

Sin embargo, en abril, el régimen chino lanzó una fuerte campaña mediática y política contra la venta, cuestionando su validez legal y exigiendo vetarla por “razones de seguridad nacional”. Esto provocó el desplome de las acciones de CK Hutchison en la bolsa de Hong Kong y la suspensión indefinida de la operación

La empresa Terminal Investment Limited (TIL), filial de MSC, busca ampliar su red de terminales, mientras que BlackRock actuaría como respaldo financiero y estratégico, dada su influencia en mercados globales.

Aunque no se ha confirmado la cancelación del acuerdo, el silencio de CK Hutchison al concluir el plazo, sumado a la complejidad política del contexto actual, aplaza cualquier cierre inminente. Se anticipa que las partes involucradas extiendan las conversaciones y modifiquen condiciones, en un intento por sortear los riesgos geoestratégicos y las posibles restricciones regulatorias.

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